Reconciliándome con mi EX

Sabemos que como emprendendores desarrollamos ciertas habilidades que nos permiten sobrevivir en un mundo con muchos cambios, sin embargo, seguimos siendo humanos y de vez en cuando tenemos que afrontar este tipo de situaciones, así que sigue leyendo para que no sufras más y continúes con tu vida emprendedora.

¿Por qué seguimos pensando en nuestros EX? ¿Por qué nos martirizamos recordando lo que fue? ¿Por qué después de tiempo seguimos buscándolos? ¿Por qué añoramos lo que no pudo ser? ¿Por qué comparamos nuestras relaciones actuales con las vividas? ¿Por qué no nos permitimos ser feliz con nuestra actual pareja?

Cuando terminamos una relación es común que terminemos enojados, siendo infieles, agresivos, apáticos, en una relación monótona, etc. ¿Pero cómo puedo olvidar a mi ex? Olvidar a tu Ex quizás no sea posible… porque ocupa ya un lugar en tu vida, pero te ofrezco cinco sugerencias que te permitirán fluir sin que te afecte su partida:

Se dice que “Recordar que es volver a vivir” así que apúrate a reconciliarte con su ausencia:

1. Admitir que la relación se terminó. Aceptar no es igual a romper cartas, fotos, bloquearlos de tus contactos, eliminarlos de Facebook, regresarle los detalles etc., esto no es aceptar que la relación ha terminado, de hecho, hasta creo que tiene un efecto paradójico porque a veces nos empeñamos más en saber cómo está, saber qué hace, stalkearlo, etc. Tú comprenderás. Aceptar que la relación terminó implica reconocer que las situaciones que se vivieron no pueden continuar por que no va de acuerdo con tu sistema de valores, creencias, etc.

2. Reconocer la individualidad del otro. Aunque muchas veces quisiéramos controlar todo, reconocer que el otro es “diferente” nos permitirá entonces saber que el otro es y será “otro” y no una extensión de nosotros, en ocasiones proyectamos en el otro todas nuestras frustraciones y deseos; de esa manera saber que el otro también siente, piensa, opina… permitirá reafirmar que esa persona también nos puede decir adiós siendo nosotros los que aceptaremos su decisión.

3. Aceptar su paso por nuestra vida. Aceptar que el otro formaba parte de nuestro aprendizaje por esta vida te ayudará a encontrar la bondad de haberse conocido, de haber coincidido en esta vida. Si la situación fue muy conflictiva entonces recíbela como un aprendizaje que te permita reconocer situaciones que no deseas seguir viviendo. Cuando culpamos al otro y lo responsabilizamos de nuestra vida, sueltas las rienda de esta y permites que los demás te puedan manipular, te vuelves vulnerable ante las situación, por eso muchas veces existe una tendencia a repetir las mismas relaciones y es cuando decimos ¿por qué a mí siempre me toca este tipo de personas?

4. Agradecer lo vivido. Cuando somos agradecidos por lo que hemos recibido de nuestros ex, nos permitimos aceptar su partida. Aceptar las alegrías y todo lo que vivimos juntos nos permitirá fluir con el universo y con nuestras propias emociones; cuando solo odias, maldices aquello que un día fue amado, te costará trabajo volverte a enamorar; cuando creas haberlo conseguido estarás propenso a volver a repetir situaciones vividas con anterioridad en tus relaciones.

5. Soltar, fluir, volver amar. Cuando aceptas lo vivido en paz, en armonía, aceptas la responsabilidad que conlleva tu vida. Cuando amas lo vivido, amas a quien se va y le cedes un lugar en tu corazón como alguien significativo sin importar si fue o no difícil la situación, le dejas un lugar de aprendizaje que te permitirá no volver a repetir la situación vivida, liberándote de la pesada cargar de seguirlo añorando.

Por último, no creas que solo volver con tu Ex es parte de una reconciliación, desearle lo mejor en su propio camino atraerá también lo mejor al tuyo.